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miércoles, 21 de diciembre de 2011

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Las escenas en los paneles laterales representan el advenimiento del Hijo de Dios en la tierra que se anuncian en las visiones milagrosas para el emperador romano Octavio (Augusto) y los tres Reyes Magos. El Niño Jesús recibe el homenaje de Oriente y Occidente, es decir, todo el mundo como se muestra en el panorama del tríptico abierto: el Oeste es simbolizado por el Imperio Romano - que fue considerado como el antecesor directo de la Santa Romana medieval Imperio - Oriente por los Reyes Magos, y entre ellos se encuentra la Tierra Santa de Belén, a la mentalidad medieval del centro y ombligo del mundo.
Las visiones de estas reglas es tomada de un texto popular en ese entonces, pero nunca antes se ilustra en la siguiente forma: el capítulo dedicado a la Natividad en la Legenda Aurea (Golden Legend, una colección de cuentos de los santos, escrito alrededor de 1270 por la República Dominicana monje Jacobo de Vorágine (1228/29-1298). Sin embargo, hubo ciertos problemas involucrados en la ilustración en detalle realista. Fue particularmente difícil para presentar la visión de Octavio de la Virgen en un altar flotando en el cielo, no sostenido por ángeles o figuras similares. Rogier resuelto este problema por estar la Virgen en un altar, obviamente, pesada, tan estrechamente enmarcadas por la apertura que se ve casi como un cuadro dentro del cuadro, proporcionando un enfoque óptico. El donante claramente quería que el texto de la leyenda se muestra literalmente, y se debe en un primer momento han solicitado citas reales también, aunque finalmente fueron omitidos, para el beneficio de la obra como un todo: la fotografía infrarroja muestra que todas las escenas originalmente contenía rollos de mantener redacción de la imagen de la izquierda,. por ejemplo, fue citar las palabras milagrosamente escuchada por Octavio, según la leyenda, al ver la visión:. AHCE est ara coeli ("Este es el altar del cielo") Sin embargo, durante la ejecución del tríptico que, obviamente, quedó claro que las imágenes que hacen su punto incluso sin ningún texto explicativo, y el texto pintado era. Tal decisión no puede haber sido realizada sin el consentimiento del cliente que encargó el retablo, y tal vez se hayan realizado durante una conversación entre Rogier y su cliente, cuando éste visitó el estudio del artista.

Bladelin Tríptico (izquierda)

1445-1450 
Óleo sobre madera de roble del panel, 91 x 40 cm 
Staatliche Museen, Berlín